En la Biblia una de las obras de la carne es “practica de espiritismo “(Gálatas 5:19-21). La palabra griega es “pharmakeia”(φαρμακία). De esta palabra se deriva la palabra actual “Farmacia” y sus derivadas “fármaco”, farmacéutica”, etc.
En la antigüedad esta palabra se usaba en conexión con la brujería, espiritismo y las drogas. Los brujos usaban drogas para alterar la mente y el cuerpo de las personas, y de esta manera controlaban a las personas y facilitaban su conexión con Satanás.
Debido a los argumentos anteriores que explique, algunos hermanos interpretan que ponerse una vacuna como la del COVID los haría caer el pecado de la “pharmakia” . Reflexionar en las ideas que explique antes lleva a muchos inexorablemente al argumento de la “pharmakeia”.
Por supuesto esto no significa que ellos rechacen fanáticamente todo producto farmacéutico. Por ejemplo, estamos seguros que el medico Lucas “el medico amado” no trataba a sus pacientes usando “pharmakia”( Colosenses 4:14)
Además, Jesús dijo:
Lucas 5:31
“Los que están sanos no necesitan un médico, pero los enfermos sí.
Estamos seguros que Jesucristo jamás animo a nadie a tratarse con “pharmakia” , sino más bien se refería a acudir a médicos como Lucas. Por eso con respecto a la vacuna COVID-19 en particular y por todo lo anteriormente expuesto estos hermanos prefieren abstenerse de estos productos farmacéuticos y acuden a médicos que usan tratamientos alternativos.
Para que ustedes lo comprendan …
Si estos hermanos que no se quieren vacunar se vacunaran se sentirían de la misma forma que ustedes practicando cualquier otra “obra de la carne”. (Gálatas 5:19-21). Estoy seguro que ustedes no desean de ninguna manera tener algún contacto con las “obras de la carne” por su conciencia. Igualmente, la conciencia de estos hermanos no soportaría vacunarse porque sentirían que cometen idolatría y sentirían que se relacionan con Satanás.
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